diciembre 14, 2009

PENSAMIENTO Y SER*

“El hombre es más grande cuando está de rodillas”
Albert Einstein

La lucha del hombre desde sus orígenes siempre ha sido por llevar a feliz término esas pautas inalterables, inmodificables por la capacidad humana, que a muchos que hacen parte de estos tiempos les fueron instruidas desde sus primeros años de academia: el hombre nace, crece, se reproduce y muere. Existencia medida por el tiempo, marcada por la sentencia de los años.

Esta misma lucha, que a lo largo de miles de años ha generado patrones, formas, manera de percibir, de acorazar el ser hacía el mundo o del mundo hacía el ser, fundamentada por reconocidos pensadores (Platón, Aristóteles, Hegel, etc.), tanto de lo que se ha denominado oriente u occidente, lleva a las interpretaciones que en su texto Política para Amador ha planteado Fernando Savater; Él afirma que cuando el hombre nace ya hace parte del mundo, así no lo haya decidido. Es parte de un orden social que él no eligió, pero que seguramente les brindó a sus progenitores las mínimas garantías para reproducirse. Realidad, solo realidad.albert-einstein

Aunque estas etapas biológicas son parte del lenguaje universal de la existencia humana, indistintamente del idioma, las costumbres, el credo, los mitos, etc. son moldeadas, presionadas o si se quiere, definidas por unas condiciones externas que se deben mencionar, entre las cuales encontramos la sociedad, las tradiciones, el entorno físico, los factores climáticos, las condiciones económicas y el tiempo de permanencia en determinado territorio. Todo esto para hacer una aproximación, una observación a manera de conclusión: los tiempos son diferentes, las sociedades diferentes, las lecciones históricas acerca de lo que no se debe hacer constituyen un legado didáctico para el presente, incluyendo proyectos políticos y sociales como el fascismo y nazismo o si se quiere el fracaso del comunismo y socialismo como formadores del hombre nuevo[1], que han contribuido para mostrar abundante evidencia que estos grandes pensadores también erraron en la lucha común por la existencia y supervivencia del ser humano, de la humanidad.

Existen aciertos, claro está, pero son mínimos. Han fracasado en su intención retórica por brindar a la humanidad dignidad humana y calidad de vida, por citar algunos ejemplos encontramos a la Unión Socialista de Repúblicas Soviéticas (URSS), que son su modelo de planificación central comunista[2], se anexo en nombre de la libertad naciones enteras contra su voluntad, mediante la intervención directa en los sistemas electorales y el poderío militar, conduciéndolos a décadas de barrotes políticos que los aprisionaron como sociedad e individuos y que a la postre se transformaron en la supresión de las libertades; o el mismo caso de la Cuba de Fidel Castro, donde bajo el lema de la Revolución se han desarrollado múltiples experimentos productivos y económicos que han llevado a fracasos rotundos, dejando para la población frustraciones y un estancamiento tecnológico evidenciado en sus paupérrimos niveles de competitividad laboral e intelectual. Y no solo esto, el pueblo enfrenta cada día a la realidad de que el comunismo ha agravado todos los problemas materiales fundamentales de Cuba hasta el punto de la desesperación. Las carencias en alimentación, vivienda, agua potable, transporte, electricidad, comunicaciones y ropa no pueden compensarse con unos sistemas de educación y de salud muy amplios, pero muy deficientes[3].

Es este punto un buen espacio para la pregunta ¿cómo generar un proceso de pensamiento en las personas? ¿Cómo con estos legados históricos se puede generar un proceso pensamiento una persona? Tarea nada sencilla cuando la habilidad de pensar se esgrime como una privilegiada herramienta que se le permite poseer al hombre (hombres y mujeres) para su sobrevivencia y la supervivencia, sin embargo, para este tiempo presente donde la información abunda, donde las fuentes son más cercanas gracias a las Tecnologías de Información (TIC´s), hay caminos evidenciados y ratificados históricamente como exitosos, para citar algunos tenemos el caso de la liberación de la India del colonialismo encabezada por Indira Gandhi y el memorable caso de Martin Luther King, donde la conexión del ser y del pensar, del ser parte y sentirse parte, permitieron que un importante grupo de personas alcanzar la dignidad de su existencia[4] sin anteponer el sacrificio de la misma a otro pueblo par, a otra comunidad de característica humana.

Proceso que necesariamente debe atravesar una profunda reflexión en los individuos y la suma de ellos, donde los sentidos son sólo un conector entre la realidad interna, de la cual es dueño cada ser, y la realidad externa, también comprensible por el individuo mediante los sentidos, tiene como punto de equilibrio el sentido espiritual, la búsqueda de esas científicamente indescriptibles necesidades de paz y armonía, de contentamiento con lo que se tiene y se puede llegar a ser.

Por eso este breve escrito inicia con una frase del más grande de los científicos de todos los tiempos, Albert Einstein, quien fue el creador de la teoría de la Relatividad que tanto ha aportado al entendimiento de la física contemporánea y sus múltiples aplicaciones, pero quien a su vez fue unos de los creadores de la bomba atómica que extermino a miles de personas para finalizar la segunda guerra mundial. Ese mismo que luego dijo frases como: “Al principio todos los pensamientos pertenecen al amor. Después, todo el amor pertenece a los pensamientos”. De este modo, el hombre más brillante, reconocido por la misma comunidad científica, llegaba al mismo punto de partida: “El hombre encuentra a Dios detrás de cada puerta que la ciencia logra abrir”.

Entonces no podemos dejar de lado lo grande e indescriptible que es reconocer que los tiempos son vertiginosos, que las necesidades básicas (afecto, abrigo, alimento, etc.) no han variado en ninguna escala ni localización humana, por eso el proceso del pensamiento se inicia por reconocer que el componente espiritual es el único precursor de las grandes revoluciones, las positivas que contribuyen a la calidad de vida del ser.

Aún en esta afirmación la experiencia personal de los autores coincide rotundamente, a pesar de que la formación y vocación es muy poco símil entre sí, en que hay una búsqueda permanente de la paz, el sosiego y la libertad, búsquedas que acompañan al ser humano en cada una de sus etapas biológicas; las cuales son la estructura central del componente espiritual, que contribuye de manera sustancial a su realización plena como seres integrales. Y es realmente este componente el que clarifica y define el rumbo para estos individuos, la razón de ser de su vida; el que depura cada el pensamiento entre en ser, pensar y actuar.

La sociedad es una invención humana, es un conjunto de normas, leyes y si se quiere convenciones establecidas por hombres y para hombres, con la intención de resolver conflictos (positivos o negativos) propios de la existencia humana, sin embargo, a pesar de eso, el individuo nunca pierde su fuero interno, su capacidad para conocerse a sí mismo y ser conocido, para identificarse como único y diferente, con acuerdos y desacuerdos. Así como lo señala Savater, cualquier sociedad humana tiene consigo determinadas empresas[5] que exigen colaboración o determinados apoyos de los individuos o ciudadanos (catástrofes colectivas, individuales, la celebración de fiestas y celebraciones comunales, triunfos de guerreros deportivos –partidos de futbol-) que refuercen en ellos los lazos de amistad civil y la emoción de formar parte de un conjunto bien armonizado. Hechos que hablan de la materialización de este componente espiritual en las actividades cotidianas de la humanidad.

Definir las técnicas para la formación del proceso de pensamiento en un ser humano es algo complejo, la naturaleza humana no es finita ni definida, sin embargo Stephen Covey, en su libro los Siete Hábitos de las Personas Altamente Efectivas define, con exquisita brillantez, unos pasos muy contundentes a la hora sugerir técnicas de autoevaluación y reflexión para la generación del proceso de pensamiento en las personas para tiempos vertiginosos y fluctuantes como el que nos acompaña cada día. Es un autor generoso en proveer de herramientas e instrumentos a los individuos para que sean ellos, en pleno uso de sus libertades, quieres tomen la rienda de su vida, la lleven por donde quieren y sienten.

“El azar no existe; Dios no juega a los dados”

*Ensayo escrito para la cátedra de proceso de pensamiento. Con la Colaboración de Julián Scarpeta.


[1] Los ideólogos socialistas siempre han incurrido en la falacia de la circularidad. En las primeras décadas del siglo XX pretendieron encontrar a su ideal de hombre en el buen salvaje de Rousseau. En las primeras décadas del siglo siguiente, han creído encontrarlo en el “hombre nuevo” de Heinz Dieterich. GHERSI, Enrique. La Falacia del Hombre Nuevo. En: Revista Perspectiva. No. 17 (2008) P. 20-22.

[2] El concepto del comunismo se entiende como la colectivización de los medios de producción, a la repartición, según las necesidades, de los bienes de consumo y a la supresión de las clases sociales y como la doctrina política y económica que propugna la abolición de la propiedad privada y el establecimiento de la comunidad de bienes.

[3] MONTANER. Carlos Alberto. ¿Ha sido Fidel bueno para Cuba?: un debate entre Carlos Alberto Montaner e Ignacio Ramonet. En: Revista Perspectiva. No. 12. 2007. Informe especial P. 4-10.

[4] Entiéndase como la oportunidad de elegir su propio destino como nación o población dentro de una nación.

[5] Entendida como el intento o designio de hacer algo.

julio 06, 2009

INVERTIR EN JUVENTUD ES GENERAR DESARROLLO A ESCALA HUMANA


“El desarrollo tiene que ver con las personas y, no sólo con objetos, y por tanto el propósito esencial de todo estilo de desarrollo será el de procurar la adecuada satisfacción de la mayor parte de las necesidades humanas fundamentales…”

Desde sus orígenes, la propuesta del Desarrollo Humano se encamino en la búsqueda de alternativas diferentes al desarrollo económico como repuesta a la creciente demanda de necesidades insatisfechas de las personas en el mundo, propuesta que en si misma generó una serie de reflexiones colectivas que prepararon el camino para abordar fórmulas funcionales y aplicables para el aumento del bienestar, felicidad y satisfacción de un individuo.
Luego de este despertar, académicos y especialistas empiezan a evidenciar, lo que a mi modo de ver es la piedra angular de este problema, que no solo existía una pobreza sino pobrezas , que cualquier necesidad humana fundamental que no es adecuadamente satisfecha revela una pobreza humana. Punto relevante para profundizar a la Juventud en una dimensión estratégica y definitiva de una generación, entendida esta como “un nuevo cuerpo social integro, con su minoría selecta y su muchedumbre (...) compromiso dinámico entre masa e individuo, es el concepto más importante de la historia y, por decirlo así, el gozne sobre el que ésta ejecuta sus movimientos".
Sin embargo, es bueno entender que la humanidad entera tiene un mínimo común englobado en un marco biológico inmodificable: nacer, crecer, reproducirse, morir, pasos que en sí mismos son inapelables e irreversibles una vez se ha iniciado el ciclo, y a su alrededor cuentan con instituciones organizadas, en el marco de un Estado, con el objeto de brindar garantías y equidad para los individuos. Entonces se puede decir que, mal o bien, hoy se tienen definidos los roles: un Estado conformado en torno a la garantía del bienestar de la sociedad y las personas que reciben y comparten este beneficio.
Sea ese el punto de partida para el proceso de análisis y reflexión, pues este mínimo biológico está acompañado por otro emocional y psicológico perfectamente definido, sintetizado en cuatro etapas de transito, cada una con sus propios estadios para el individuo: niñez, juventud, adultez y adultez mayor. Pueden tener diversos nombres de acuerdo a la disciplina académica que los estudie y le pueden ser asignados distintos valores, pero conserva esos inapelables pasos naturales y biológicos que cualquier ser humano debe transitar.
Entonces, desde ese postulado se encuentra un piso, un soporte más amplio para delimitar y profundizar la discusión del Desarrollo Humano en cada paso mencionado, deteniéndonos en la Juventud y los jóvenes que la integran, entendidos estos como unos agentes con capacidad de integración y cohesión social, población cuya dinámica se acompasa naturalmente al ritmo de los tiempos y que demanda acciones precisas y efectivas en las cuales el rol del Estado y de la sociedad se hace más claro y más lógico, perfilando la inversión en la juventud y los jóvenes, generando desarrollo a escala humana.

Ver ponencia completa en http://jefesdebate07.byethost5.com/index.php?option=com_content&view=article&id=61&Itemid=78

agosto 20, 2008

ANTROPOLOGIAS TRANSEUNTES


Juan Gabriel Garzón Guerrero

En este fragmento del libro “Antropologías Transeúntes” sus autores pretenden postular el conflicto que ha acarreado la antropología en Colombia desde su institucionalización en 1940, con sus supuestos y exclusivos intereses de estudio: la cultura y los indios; planteando un nuevo escenario para la re-definición de nuevas modalidades de alteridad que se están discutiendo gracias a la disolución o redefinición de sus objetos de estudio.
A partir de unas líneas de trabajo que viene con la “nueva generación” de antropólogos, se logran recopilar unos apuntes y colaboraciones para el libro que cuestionan de manera explicita o implícita, muchos de los supuestos sobre los cuales se edificó gran parte de la antropología en Colombia. Es así como el autor hace manifiesta la propuesta de cambio de la razón de ser de la antropología, pasando de la búsqueda y definición de esencias culturales, la descripción de costumbres y gente exótica a la naturaleza de la pluralidad cultural en el actual contexto de la globalización.
Pero para hablar del cambio gestante en la antropología colombiana, era necesario conocer como se ha dado su trasegar desde 1940, trayendo a colación la discusión académica que se gesto dentro de la disciplina, donde se encuentra la polarización radical que tuvo lugar entre los antropólogos que no lograban un consenso acerca del quehacer antropológico, por un lado estaban los que entendían el ejercicio como la expresión de ciencia objetiva y en el otro, los “antropólogos militantes”, que cuestionaban la concepción de ciencia objetiva, y proponían una antropología militante, comprometiéndose políticamente con las poblaciones con las que trabajaban y defendiendo sus causas. Sin embargo, bueno es aclarar que a pesar de tener puntos de vista divergentes, entre ellos había un común respeto y dialogo con unos implícitos que hacían las veces de “subsuelo” académico para las discusiones (trabajos de campo o exploraciones en terreno, una misma noción acerca de lo que es la cultura, el valor de la evidencia empírica de la cultura).
Alternado con esta profunda discusión y división, los autores nos señalan un punto muy importante para seguir comprendiendo la dinámica de la antropología colombiana, y fue la cruzada antropológica contra el etnocentrismo occidental, anclada en el relativismo cultural, que era un punto central en la agenda de los antropólogos, aunque para unos significará un compromiso ético con la ciencia y para otros uno político con los pueblos objetos.
¿Cuáles fueron las consecuencias que trajo este proceso? Que en las diferentes formas de producción antropológica (cursos enseñados en las universidades, las ponencias presentadas, los textos publicados, etc.) el “indio” se convirtió en el objeto antropológico por antonomasia. Conduciendo a algo que muchos definen, como un termino acuñado de mucha trascendencia: la “indionacionalización” de la antropología. Lo cual se define en el texto como un indio genérico para el común de la gente, el cual se hacía visible por unos rasgos arbitrarios: collares, vestidos, tipos de vivienda, todos adjetivados como “tradicionales”, ocultando las relaciones sociales de poder concretas y con un recorrido histórico en su gestación
En la pretensión de ir más allá de la cultura, el arqueólogo Franz Flórez propone la problematización de la antropología por la lectura indianizante que se venía desarrollando, en el texto Encrucijadas en Colombia Amerindia, que bien encaja con la propuesta de Eduardo Restrepo y María Victoria Uribe, puesto que Flórez cuestionaba la mirada exotizande de “comunidades” aisladas y discretas, que dejaba a un lado los múltiples procesos de relación, conflicto e inserción en las dinámicas locales, regionales, nacionales y globales.
Es así como se va delineando la discusión, pues lo que se ha denominado antropología en la modernidad por un lado cuestiona y crítica la predominante mirada indianizada de la antropología en Colombia, y por el otro, propone una re-localización del proyecto antropológico. Entonces, se pone por presente que existen serias limitaciones cuando se entiende la cultura como una entidad autónoma y explicable en sus propios términos, como una cosa separada de otras igual de importantes y determinantes como la economía, la sociedad, la religión, etc.
Resalta el autor que por “indiologización” de la antropología no se debe entender simplemente que la antropología se haya centrado en el estudio de los indios, si no en las estrategias descriptivo-explicativas que han producido al indio como otro esencial, y que el proyecto antropológico consistiría, de un lado, en examinar cómo se constituyen y operan las diferentes modalidades de la alternalidad y, de otro, exotizar las modalidades del mismo, no definido por la población sino por el tipo de preguntas que se formulan.
Aunque en esta obra se encuentran más aciertos que equivocaciones, la recopilación juiciosa por parte de los autores evidencia que se está gestando un nuevo proyecto de antropología en las nacientes generaciones, un proyecto que esta más ajustado a la realidad de los objetos de estudio en cuanto a sus relaciones, conflictos e inserciones; entendiendo a la cultura como un articulador y dinamizador de los objetos de estudio.

agosto 16, 2008

¡SEÑORES! YO TAMBIÉN VEO FUTBOL



Hoy por hoy el futbol es parte fundamental de la cultura colombiana, agrupando alrededor de sí a chicos y grandes, a hombres y mujeres; en su seno recibe y cuenta la historia de varias generaciones que lo han venido acompañado desde los años 40.
Por tanto, somos mucho los que hemos crecido acompañados por este deporte, algunas veces cerca, otras un con un poco más de distancia, y es bueno traer a colación una frase anónima desde el cono sur: “escoger un equipo de futbol es determinar como se van a pasar los domingos por el resto de la vida”.
Este deporte está rodeado de una serie de actores, algunos más visibles que otros, entre los cuales están los deportistas, los clubes, los empresarios y la “hinchada”, el combustible de este espectáculo. Sin embargo, también hay otros actores que son indispensables dentro de este medio, el periodismo deportivo, que incide directamente en la opinión pública mediante los medios masivos comunicación (televisión, radio, prensa, Internet) en cabeza, en la mayoría de los casos, de reconocidos personajes por su trayectoria en el medio y sus equipos de trabajo.
Y es ahí donde las cosas se empiezan a complicar, pues en algunas ocasiones he sentido contrariedad y hasta maltrato por parte de estos periodistas deportivos, pues en la lucha enconada por obtener rating y de paso credibilidad, han optado por atacarse entre si, por usar su incidencia en el público para desmembrar con argumentos y ofensas a sus colegas, dejando a un lado lo que a nosotros nos interesa: el futbol.
Para muchos este no es un tema nuevo, concepto que comparto, pero me niego a continuar entre este embrollo sin pronunciarme, pues yo también voy a futbol desde que tenia 6 años, también lo he jugado, he disfrutado de 5 Mundiales con todas las revoluciones tecnológicas de esta época, lo he disfrutado desde oriental, occidental, desde las populares con y sin barra brava, he sintonizado distintos diales buscando solamente que lo que escuchase coincidiera con lo que estaba viendo dentro del campo de futbol, pero hasta hoy no lo he conseguido.
Señores periodistas no nos limiten, pues como hinchas y radioescuchas hemos formado con el pasar del tiempo un criterio que no es menos válido que el de ustedes, pues aunque no devenguemos de este deporte salario alguno, lo seguimos por gusto y esparcimiento. Ya me he cansado de su antipatía y de escuchar de ustedes desaires tales: “si no le gusta lo que digo, no me escuche” o “a mi me pagan por decir lo que pienso”, creo que no se trata de eso, se trata del respeto que nosotros merecemos de parte de ustedes para continuar disfrutando del futbol.

¡Señores! Yo también veo futbol.

julio 11, 2008

Queda prohibido…



Queda prohibido llorar sin aprender,
Levantarse un día sin saber qué hacer,
Tener miedo a tus recuerdos.
Queda prohibido no sonreír a tus problemas,
No luchar por lo que quieres,
Abandonar todo por el miedo,
No convertir en realidad tus sueños.

Queda prohibido no demostrar tu amor,
Hacer que alguien pague tus deudas y mal humor.

Queda prohibido dejar a tus amigos,
No intentar comprender lo que vivieron juntos,
Llamarles sólo cuando los necesitas.

Queda prohibido no se tú ante la gente,
Fingir ante las personas que no te importan
Hacerte el gracioso con tal de que te recuerden,
Olvidar a toda la gente que te quiere.

Queda prohibido no hacer las cosas por ti mismo,
No creer en Dios y hacer tu destino,
Tener miedo a la vida y a sus compromisos,
No vivir cada día como si fuera el último suspiro

Queda prohibido echar a alguien de menos sin alegrarte,
Olvidar sus ojos, su risa, todo
Porque sus caminos han dejado de abrazarse,
Olvidar su pasado y pagarlo con su presente.

Queda prohibido no intentar comprender a las personas
Pensar que sus vidas valen más que la tuya,
No saber que cada uno tiene su camino y su dicha.

Queda prohibido no crear tu historia
Dejar de dar las gracias a Dios por tu vida,
No tener un momento para la gente que te necesita
No comprender que lo que la vida te da
También te lo quita.
Queda prohibido no buscar tu felicidad,
No vivir tu vida con una nueva actitud positiva,
No pensar en que podemos ser mejores,
No sentir que sin ti este mundo no sería igual.
Pablo Neruda

julio 03, 2008

COLOMBIA: EL AVE FÉNIX

Hoy rompo estos 7 largos meses de silencio por causa del horror y los pocos escrúpulos políticos para abordar el tema del “acuerdo humanitario” que se le dio desde lo medios y los sectores políticos tradicionales, incluyendo los que se denominan como oposición.

Pero antes de entrar en materia, quiero dejar de manifiesto que en mi poco entender acerca de la política y las relaciones internacionales, las encuentro como herramientas, instrumentos y disciplinas para buscar el desarrollo de la humanidad, las garantías mínimas para la distribución del bienestar en todos los miembros de la sociedad, es decir, están es para servirlos a ellos.

Desde el mes de diciembre, cuando se anuncio con bombos y platillos la “caminata” hacía la libertad de la Dra. Clara Rojas y su hijo Emmanuel junto a la Dra. Consuelo de Perdomo, se experimento un fase de internacionalización del conflicto armado colombiano, donde aparecieron con mucha vehemencia e irreverencia actores internacionales, tales como el presidente Zarcosy de Francia y Hugo Chávez de Venezuela ejerciendo presión sobre el gobierno colombiano y sus políticas internas frente al conflicto interno. Y fue desde ese momento cuando se empezó a vivir en nuestro país la polarización más dramática con un final (en ese momento) incierto. Por un lado estaban los que a todo precio exigían el despeje de Pradera y Florida, y por otro los que acompañaban la férrea posición de no ceder ni un milímetro en el marco de la Política de Seguridad Democrática, y surgió entonces el macabro argumento, para los dos bandos, que la defensa del sentido humanitario dejo de ser un fin para convertirse en un medio, un perverso medio.

Una serie de acontecimientos mas acompañaron este agónico transito, la muerte del guerrillero Raúl Reyes desato todo una maremagnun internacional, donde se levantaron los presidentes Correa y Ortega para señalar y acusar, que se apaciguo en la Cumbre de Río, pero que no ha terminado por el hallazgo y publicación de los archivos contenidos en sus computadores que presuntamente vinculan a importantes figuras reconocidas con las FARC; luego dos golpes más contra los el Secretariado y mas temas para los medios de comunicación, pero seguíamos viendo y observando en los dos bandos la indiferencia ante el sentido humanitario.

Hoy rompo mi silencio con este breve y sucinto resumen motivado por el acontecimiento de la liberación de estos 15 compatriotas a manos de las Fuerzas Armadas, lo hago por que veo, sin hablar de un gobierno o de una ideología política, que este pueblo colombiano es parecido a la mítica ave Fénix, que se levanta de sus cenizas, pero no se levanta solo, se levanta para tender la mano a sus semejantes, se levanta para acompañar en la tristeza y la alegría a cualquier ser humano, no importa su nacionalidad o condición; por eso rompo mi silencio hoy, para decir que el ser y sentir de los colombianos ya desbordo los pensamientos políticos tradicionales y demanda a gritos alternativas y opciones diferentes para este presente y futuro de este país.

“A los policías y soldados de Colombia no se les quiebra el espíritu”. Pérez. Cabo segundo y enfermero.

noviembre 22, 2007

MIRA CONTINUA

Un saludo para todos.

Luego de una maratónica jornada electoral, en la cual MIRA ha salido victorioso, y luego de tomar un pequeño aire, la responsabilidad asumida con nuestros electores demanda atender con propiedad el compromiso permanente que nos ha caracterizado, para continuar haciendo las cosas bien, del mismo modo como lo ha hecho el concejal Carlos Alberto Baena.


Y es grato para nosotros saber que ahora contamos con dos concejales y cuatro ediles en las localidades más importantes de Bogotá, por ende, nuestro trabajo se duplica y en lo local se intensifica.


Motivo por el cual la gratitud, el deseo y la satisfacción de aportarle a todos los bogotanos una gestión política de calidad y con resultados, me insta a compartir con todos ustedes, mis amigos y grandes colaboradores, que delante de nosotros se abre hoy un camino, hoy en tiempo y espacio tenemos la oportunidad real de seguirnos pensando las vías de desarrollo social y económico para todos, especialmente para nosotros los jóvenes.


En la Zona Centro los resultados electorales de MIRA son muy positivos, muestran que la labor desarrollada por la Coordinación Local fue muy exitosa, motivo por el cual se ha dispuesto que continuemos con la labor, trabajando del mismo modo para en 4 años aspirar al cargo ejecutivo más importante de Bogotá.


Por eso extiendo a ustedes una invitación, para que le permitan a MIRA contar con su aporte, siempre valioso y determinante, pues fue en equipo que logramos este resultado y será en equipo como lo continuaremos en el tiempo.


Un abrazo para todos

Juan Gabriel Garzón Guerrero